Anleo se convirtió hoy en símbolo del progreso industrial asturiano con la inauguración de la nueva línea de producción de mozzarella de Industrias Lácteas Asturianas (Ilas), más conocida por su marca comercial Reny Picot, que ha congregado a autoridades, trabajadores y representantes del tejido económico regional en un acto cargado de simbolismo. El presidente del Principado de Asturias, Adrián Barbón, ha presidido el evento, que supone un importante hito para el sector lácteo regional y nacional.
“La modernización de esta línea representa un avance tecnológico y también un compromiso con el desarrollo económico del occidente costero asturiano”, afirmó Barbón, quien destacó que la inversión —que asciende a 15 millones de euros— permitirá incrementar en un 25% la capacidad productiva de la planta, hasta alcanzar las 20.000 toneladas anuales de mozzarella. Una treintena de nuevos empleos directos completan el impacto de una obra que comenzó en abril de 2024 y que ha incorporado la tecnología más puntera del mercado.

Pero el discurso del presidente fue más allá de los números. En una intervención que combinó reconocimiento personal, reflexión estratégica y visión de futuro, Barbón dedicó palabras de elogio al fundador de Ilas, Francisco Rodríguez, a quien definió como “la encarnación real, tangible, del compromiso de un empresario con el territorio donde realiza su actividad”.
“Hoy estamos ante un episodio más de la aventura que inició en 1960 aquí, en Anleo, con la fabricación de queso camembert en un pequeño local de baile. Esa es una de las mejores noticias del día: 65 años después, la aventura empresarial de Francisco Rodríguez continúa”, subrayó el presidente.
Barbón resaltó tres rasgos fundamentales del empresario: su talento empresarial, su compromiso con Asturias y su aportación intelectual al sector lácteo. En este último punto, destacó que las reflexiones de Rodríguez tienen un nivel que merece reconocimiento público. También recordó su labor al frente de la Fundación Archivo de Indianos, en Colombres, como otra muestra de su vinculación profunda con el Principado.
La jornada fue una celebración de éxito empresarial y una declaración de intenciones políticas. El presidente aprovechó la ocasión para subrayar el papel que el Gobierno asturiano quiere que juegue el medio rural en la transformación del modelo económico de la región. “Tenemos que romper la falsa dicotomía que asocia la innovación con lo urbano y la tradición con el campo. El medio rural es ya un espacio de dinamismo y de futuro”, afirmó Barbón, adelantando que este mismo año se lanzará el “Pacto por el Medio Rural”, liderado por el consejero Marcelino Marcos.

La nueva línea de producción es también una apuesta por la internacionalización. Los productos de Ilas ya están presentes en numerosos mercados y la empresa busca seguir creciendo en el ámbito global. “Sin miedo a exagerar, podemos afirmar que hoy, con esta inauguración, Asturias se refuerza como marca de calidad agroalimentaria en el mercado global”, concluyó el presidente.
Así, en Anleo, el pasado y el futuro se dieron la mano. La historia que comenzó en un local de baile en 1960 sigue escribiéndose con nuevos capítulos de innovación, empleo y compromiso territorial. Como dijo Barbón, “como ocurre con las buenas series, el público espera el estreno de la próxima temporada”.