Solo un 16,9% de estas personas tiene trabajo, según datos del INE. La iniciativa regional, de la que forma parte la Fundación Edes, iniciará su andadura con el acompañamiento de entre 50 y 70 personas
Sirviéndose de los mejores aliados, sociales y empresariales, el Gobierno de Asturias pone en marcha «una nueva red de apoyo» para facilitar el empleo de las personas con discapacidad psicosocial. Según explica, «se trata de un sistema de colaboración para ofrecer oportunidades de trabajo digno y estable a este colectivo y salvar los obstáculos a los que se enfrenta, entre otros, el estigma, la discriminación, la falta de adaptación de los entornos laborales a sus necesidades o la ausencia de información sobre los apoyos a su disposición».
Este «nuevo modelo» se traduce en un refuerzo y aprovechamiento de recursos y programas ya existentes, que se adaptarán para facilitar el acceso al empleo de esta parte de la ciudadanía «sirviéndose de la corresponsabilidad y la capacidad inclusiva de las administraciones, las entidades y las empresas implicadas en la iniciativa». El plan de acción está diseñado por las consejerías de Salud y de Ciencia, los servicios de Salud del Principado (Sespa) y de Empleo (Sepepa), y las fundaciones Edes y Vinjoy, además de las asociaciones Hierbabuena y de Familiares y Personas con Enfermedad Mental de Asturias (Afesa), y cuenta con tres objetivos claros.
Durante su primer año, la nueva Red busca sumar entidades públicas, sociales y privadas que puedan aportar en la incorporación laboral de este colectivo. También, establecer procedimientos de colaboración entre ellas en los distintos concejos y acompañar a las primeras personas con discapacidad psicosocial en su camino hacia el empleo. La iniciativa se iniciará con el acompañamiento de entre 50 y 70 personas.
Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) solo el 16,9% de estas personas con discapacidad psicosocial tienen trabajo. En comparación, el 28,5% de quienes tienen cualquier tipo de discapacidad están ocupadas y el 69% de quienes no tienen ninguna discapacidad trabajan. «Estas cifras evidencian una brecha significativa en la inclusión laboral de las personas con problemas de salud mental que repercute negativamente en su autonomía, su inclusión en la comunidad y, en definitiva, en sus proyectos de vida», subraya el Principado, que considera «urgente» poner en marcha políticas que aborden estas barreras.
La Red, que se presentó este martes, está integrada por diferentes grupos: miembros de pleno derecho y capacidad de voto; colaboradores, que se centrarán en el desarrollo de actividades concretas y en ofrecer respaldo técnico y operativo en proyectos y programas; y aliados estratégicos, que prestan asesoría estratégica para el diseño de políticas, planes y acciones.
«Además, habrá un grupo coordinador formado por los miembros de pleno de derecho y las secretarías técnicas del Sespa y del Sepepa. Igualmente, funcionarán varios grupos de trabajo temáticos: empleo e inserción laboral, formación y capacitación, sensibilización y comunicación y cohesión interna e impacto, trasferencia y sostenibilidad», detallan el Ejecutivo autonómico, que defiende «el avance en la equidad de las personas con discapacidad psicosocial y su integración como una prioridad» recogida, por ejemplo, en el Plan de Salud Mental del Principado (2023-2030).
